22 feb 2018

Juan Carlos Fernández Rincón, pregonero de la Virgen de la Montaña

Juan Carlos Fernández Rincón (Burgos, 1954) será el próximo pregonero de la Virgen de la Montaña, patrona de la ciudad. El acto se celebrará el 19 de abril, a las 20.00 horas, en el Gran Teatro.

Fernández Rincón preside desde 2013 el Banco de Alimentos de Cáceres. Es coronel del Ejército en situación de reserva. Hijo y nieto de militares, está casado

y tiene dos hijos. Atesora un gran vínculo con el mundo de las cofradías. Es el vicemayordomo de la cofradía de la Montaña. Y pertenece, además, a la del Cristo de las Batallas. No será su primer pregón. En 2012 fue el encargado de pronunciar el dedicado a San Jorge, patrón de Cáceres. Y en 2016 fue homenajeado en la Gala del Mayor.

12 ene 2017

LORENA JORNA Pregonera del novenario de la Virgen de la Montaña

Esta casada y tiene un hijo de dos años. Lorena Jorna Boticario (Cáceres, 26/12/1985) será la tercera periodista, tras Sonia Cobo y Miguel Ángel Muñoz, en dar el pregón del novenario de la Virgen de la Montaña. Diplomada en Turismo y licenciada en Comunicación Audiovisual, es la responsable de comunicación de la Diócesis Coria-Cáceres tras haber pasado por la cadena Cope y el semanario cultural Avuelapluma.

-La Junta Directiva de la cofradía de la Virgen de la Montaña decidió su nombramiento por unanimidad. ¿Cuándo se enteró y qué supone para usted?
-Me lo comunicaron en octubre, justo tras decidirlo. Me llamó Joaquín Floriano y me quedé abrumada por la confianza que había depositado en mí la cofradía. Evidentemente dije que sí.
-¿Qué tipo de pregón va a dar? ¿De mensaje o de vivencias?
-Aún no lo tengo terminado pero sí que hay varias partes ya estructuradas. Quiero hablar de María como una mujer de su época, como modelo de creyente y como Madre de la Iglesia, aunque también aportaré mis vivencias personales y profesionales.

-¿De quién se va a acordar ese día tan especial?
-Me acordaré de mi abuela Antonia, que le tenía gran devoción a la Virgen de la Montaña, de mis padres y abuelos, de mis raíces y mi infancia... Aunque mis abuelos ya no vivan, seguramente estarán acompañándome ese día.

-¿Su pertenencia a la Iglesia Católica le viene de familia?
-Soy creyente y estoy muy involucrada en el mundo eclesiástico en diversos ámbitos. Mi familia me ha transmitido la fe y esa devoción por la Virgen.
-¿Es usted miembro de alguna hermandad?
-No. Mi padre pertenece a la cofradía del Nazareno y mi madre y mi abuela materna han portado la Virgen, por lo que siempre he estado muy vinculada a la Semana Santa.

-¿Cuál es su momento favorito del novenario?
-Tengo varios. La presentación de los recién nacidos me parece un momento entrañable y el Besamanto también es especial. No obstante, siempre que puedo trato de ir cuando no va tanta gente porque intento que sea un momento lo más íntimo posible.

-Su hijo está presentado a la patrona, ¿no?
-Sí, por supuesto. Nació en 2014 y se presentó en mayo del 2015.

-¿Dónde hay que ver la procesión de bajada?
-Mis mejores recuerdos y donde siempre la veo es en Fuente Concejo. Es el sitio especial donde la recibo, cuando se le entrega el bastón de mando de la ciudad.

-¿Qué significa visitar a la patrona?
-Es como una madre. Yo le pido que me guíe y me ayude en mis momentos de dificultad, así como en los de alegría. Soy de acudir al santuario. Es como cuando hablas con tu madre y le cuentas todo lo que te pasa, lo bueno y lo malo. Siempre llevo una estampa de la patrona, junto a otra de San Pedro de Alcántara.

-¿Qué deseo le pide a la Virgen de la Montaña para este 2017?
-Sobre todo salud. Luego, que me acompañe en mi vida y en mi fe y que esté al lado de los que sufren. Ya que ella fue la primera refugiada al tener que salir de su tierra, que acompañe y de consuelo a todos los que sufren.

3 jun 2016

Crece la colección de mantos de la patrona

La colección de mantos de la Virgen de la Montaña acaba de sumar dos nuevas incorporaciones. Se trata de dos piezas donadas por Charo Cordero y Teresa Gijón. Una es de color rojo cereza y la otra está confeccionada en tonos anaranjados. La patrona cuenta en estos momentos 130 mantos. La cosa no queda ahí porque está prevista la llegada al Santuario de otros dos mantos en los próximos meses, según avanza Pilar Murillo, la camarera de la Virgen. Además de amigas, Charo y Teresa son devotas de la Virgen de la Montaña. Tenían muchas ganas, ilustran, de regalarle un manto. Los han confeccionado ellas mismas, con un patrón base que les han facilitado desde la cofradía.

Charo es modista. A su pericia con la aguja se suma su experiencia. «Ya le hice un manto a la Virgen de Perales del Puerto, que es el pueblo de mis padres. Y tenía mucha ilusión por hacer algo a la Virgen de la Montaña», detalla.

Tras la donación de Teresa se esconde una promesa. «Tenía que ofrecerle algo porque ella me lo ha dado a mí. He estado malita y ella me ha dado todo. Tenía una deuda con ella. En mi familia todos somos de la Virgen de la Montaña. Tanto mis hijos, como mi marido y yo teníamos que ofrecerle algo», repite emocionada.


La cofradía espera la llegada de otros dos mantos al Santuario en los próximos meses
Estas dos mujeres, acompañadas por sus maridos, entregaron los mantos en el Santuario hace unos días, al término de la misa que se oficia cada jornada a las nueve de la mañana. Estuvieron arropadas, además, por familiares y amigos.

La pieza de Charo es de color rojo cereza. Está confeccionada, describe, con seda de algodón estampado con motivos dorados. Una pasamanería remata el manto. El de Teresa es de color naranja y también tiene estampaciones doradas.

A la hora de decantarse por una tonalidad, cuentan, se dejaron asesorar. Preguntaron qué colores faltaban en la colección de la Virgen para cubrir los huecos existentes. «Hay que adaptarse a lo que tenga la Virgen», apostilla Teresa.

Cambios semanales

Hecha la donación, el deseo de estas dos amigas es ver a la patrona luciendo las piezas que han realizado con tanta entrega y dedicación. Su máxima ilusión, detallan, es que sean seleccionadas el año que viene durante el novenario en la Concatedral de Santa María. Durante su estancia en la ciudad, la patrona luce un manto distinto cada día y entre los cacereños existe la tradición de 'jugar' a adivinar el color seleccionado cada jornada. El resto del año el cambio de manto se realiza con carácter semanal.

La pieza más antigua de la colección de la patrona fue donada por la reina Isabel II. Está confeccionada en raso blanco y recubierta con encaje de fondo de malla e hilo de oro y plata. Tiene, además, aplicaciones de flores bordadas en seda de color. La Virgen la lució en su coronación canónica, el 12 de octubre de 1924.

EL DATO
130 mantos integran en estos momentos la colección de la Virgen de la Montaña. Está previsto que en los próximos meses se incorporen otros dos, uno de ellos será de cola y la talla podrá lucirlo durante el besamanto.

24 may 2016

La imagen de la patrona es sometida a un proceso de escaneo en 3D por la UEx

La Virgen de la Montaña, patrona de la ciudad, acaba de ser sometida a un escaneo en tres dimensiones con un margen de error de apenas 0,5 milímetros. Con el modelo obtenido, la cofradía podría hacer una réplica exacta de la talla si fuera necesario. La imagen es original del siglo XVII.

El camarín del Santuario recibió el viernes por la tarde la visita de los integrantes del grupo de investigación Nexus, vinculado a la Escuela Politécnica de la Universidad de Extremadura. Se trata de un equipo multidisciplinar, centrado en la aplicación de la ingeniería a campos como el patrimonio o el territorio.

Una colaboración entre la cofradía de la Virgen de la Montaña y este grupo ha permitido la realización de este completo estudio, efectuado con cuatro equipos distintos: una cámara térmica (para analizar la temperatura de la talla), una cámara hiperespectral (muestra detalles que el ojo humano no aprecia), un espectro radiómetro (permite observar la composición química y detalles de los pigmentos) y un escáner de mano (que proporciona un modelo en 3D de gran precisión de la imagen).
Con el análisis de todas estas variables, el modelo obtenido permitiría reproducir la imagen de la Virgen de la Montaña con total fiabilidad. «En el caso de que la talla desaparezca, se robe, haya un desastre o cualquier catástrofe se podría hacer una réplica. Todos estos datos se guardan en el ordenador y se pueden utilizar en el momento en el que sea necesario», explica José Juan San José, el coordinador de Nexus.

Uno de los equipos empleados, la cámara hiperespectral, se suele utilizar también en el mundo del arte para radiografiar cuadros y descubrir, por ejemplo, los trazos incipientes que precedieron al óleo. En el caso de la Virgen de la Montaña, permitirá ver las capas de pintura que tiene la imagen e, incluso, lo que se oculta tras ellas

No es la primera vez que la Universidad colabora con la cofradía. Cada vez que llegan nuevos equipos al grupo Nexus, sus integrantes hacen una propuesta a la hermandad. De hecho, ya existe un escaneo del edificio y del retablo mayor. También han trabajado en la Catedral de Coria, en la Concatedral de Santa María y en la ermita de San Jorge. El grupo de la Politécnica ha viajado, además, hasta Portugal para lograr las réplicas tridimensionales de la Torre de Belén, en Lisboa, y del monasterio de Alcobaça.


Colaboración con la Diócesis

Hasta el Santuario se desplazó el viernes Florencio García Mogollón, delegado de Patrimonio de la Diócesis de Coria-Cáceres y catedrático de Historia del Arte. El grupo Nexus, explica, es un colaborador habitual del Obispado. Hace un seguimiento anual de los movimientos que tiene la Catedral de Coria, entre otros trabajos.

Pedro Luis Aguilar, Luis Francisco Martínez, Mari Ángeles Parrilla, Manuel Sánchez y José Moreno completan el equipo de investigación desplazado hasta el Santuario.

Según los datos facilitados por Miguel Ángel Ortí Belmonte en su libro 'Historia del culto y del Santuario de Nuestra Señora de la Montaña', la fecha del tallado de la imagen se sitúa entre los años 1620 y 1626. Es de autor desconocido. «Está hecha en madera de nogal, de cuerpo entero, sobre peñas terminadas en prismas (...). Viste manto que cae desde la cabeza, de color azul, y túnica que sujeta con un cinturón en rojo y oro», describe el autor.

La patrona de Cáceres mide 58 centímetros. La cabeza tiene diez centímetros y la cara ocho. La figura del niño Jesús mide 25 centímetros. «Descansa sobre una peana cuadrada, que lleva en bellas letras capitales del siglo XVII la leyenda Nuestra Señora de Monserrat», apostilla Ortí Belmonte. Hay que recordar que fue así como se denominó inicialmente a la imagen. Todos estos detalles están ahora a salvo en un ordenador.

21 abr 2016

LA FIESTA DE LOS PATRONOS / LA PROCESIÓN DE BAJADA

Imbatible al Real Madrid, al Barça y al Atlético. Imbatible también a la lluvia que finalmente no hizo su aparición con la fuerza que se esperaba. La cofradía solo se vio obligada a colocar a la talla el nuevo iglú confeccionado para la ocasión a su llegada a Fuente Concejo, pero en la calle Caleros lo pudo retirar, aunque en la plaza Mayor la imagen se cubrió de nuevo hasta su entrada en Santa María.

Decenas de cacereños (se notó la ausencia de la cantaora Felisa Rodríguez que no pudo asistir por encontrarse indispuesta) volvieron a demostrar ayer su infinita devoción hacia la Virgen de la Montaña y en masa acudieron a recibirla en Fuente Concejo. Fue una procesión de bajada que estuvo plagada de homenajes porque la Real Cofradía introduce cada año novedades que hacen de este desfile uno de los de mayor calado en la ciudad. Probablemente el más sentido y merecido fue el realizado a la Asociación de Lucha Contra el Cáncer. La Virgen lució para ello flores rosas en su honor y la presidenta de este colectivo, Carmen Romero, compartió presidencia en la procesión con el mayordomo de la Montaña, Joaquín Manuel Floriano Gómez. Además, la fachada del ayuntamiento se iluminó en azul de modo extraordinario en honor a la marca de color de la cofradía.

Cáceres vivió una jornada inolvidable aún a la espera de que la Junta tenga a bien otorgar el título de Fiesta de Interés Turístico Regional a la procesión de bajada, una costumbre que se repite desde el 3 de mayo de 1641, fecha en la que la talla bajó por primera vez desde su santuario ante las peticiones del vecindario en un año de grandes sequías.

Ayer volvió a hacerlo, en presencia de numerosas autoridades encabezadas por el presidente del gobierno extremeño, Guillermo Fernández Vara, de quien lo antecedió en el cargo, José Antonio Monago, y de la delegada del Gobierno en Extremadura, Cristina Herrera. Una procesión magnífica para honrar a la Virgen de la Montaña, a la que los cacereños rinden culto desde el siglo XVI.

Desde primeras horas de la tarde, los vecinos se congregaron en el santuario, elefantiásico edificio del siglo XVIII, amparado por Santa Ana y el Cristo de la Salud de Juan Salvador Carmona, y cobijados por la inmensidad de su retablo churrigueresco del presbiterio, obra barroca de Manuel de Lara y Churriguera. El objetivo, solo uno: honrar a esta talla de estilo sevillano realizada en madera de nogal policromada por artista desconocido entre los años 1620 y 1626.

La procesión tiene tras de sí un gran trabajo de organización, de modo que bien merecido se tenían los cofrades y miembros de la junta de gobierno de la Real Cofradía su comida en el restaurante del santuario: los huevos fritos con patatas y chorizo que marcan la tradición. Poco después, en torno a las cinco de la tarde, el hermano mayor, Antonio Fernández Borrella, organizó los turnos de carga con el reparto de planillos. Lo hizo junto al templete, donde como es habitual quedaron dispuestos los cuatro turnos de 30 hermanos que conforman los 120 que cargan a la Virgen (todos menores de 65 años) y cada uno con sus jefes de paso. Tras la eliminación el año pasado del turno de los suplentes, en la cofradía existen ya tres escalafones (aspirante, activo y veterano). Este año había 80 hermanos aspirantes, de ellos 6 pasaron a ser hermanos titulares.

TURNOS Los aspirantes cargan siempre que hay sitio, es decir, en función de la falta de asistencia de los hermanos titulares de carga que se ausenten, aunque lo cierto es que son muchos los titulares que ceden minutos a los aspirantes para que puedan cumplir el anhelado sueño de portar las andas de la Virgen. Tras la organización de turnos se entregaron las medallas a esos seis hermanos por parte del mayordomo o en su defecto de los padrinos elegidos por los hermanos. Posteriormente se rezó la Salve.

La procesión de bajada inició su camino en torno a las cinco de la tarde. La imagen salió a hombros del turno primero bajo los sones del Himno de España y sobre sus andas de plata adquiridas en los años 60 en un taller sevillano de 120 kilos de peso. La camarera, Pilar Murillo, la vistió primorosa con el manto que le regaló la ciudad para las bodas de plata de la coronación canónica en 1949, una prenda magnífica de estilo renacimiento, hecha de tisú de plata fina con oro fino de alto relieve.

Encabezaba el cortejo, a modo de cruz de guía, el estandarte que los cacereños regalaron a su patrona en 2006 con motivo del centenario de la declaración del patronazgo canónico de la Virgen sobre la ciudad. Obra de María Jesús Trejo, es blanco, ribeteado en bordados de oro, con una imagen de la talla en el centro sobre la que se lee su título de Madre de la Divina Gracia.

Justo al lado de la imagen de la patrona, el estandarte de la cofradía, conocido como primigenio, de raso, con un medallón de plata en el centro que reproduce en oro la imagen de la Virgen. La imagen lucía espléndida. Sobre su sien, la corona de diario, llena de majestuosidad, circular de plata dorada, elaborada con las joyas que sobraron de la comunmente denominada 'Corona buena', fabricada en 1924 por el prestigioso joyero madrileño Félix Granda, de cruces de rubíes, oro, brillantes, zafiros y esmeraldas, cuajada de diamantes por la que se pagaron 150.000 pesetas.

Esa corona fue fruto de las donaciones de miles de devotos anónimos con motivo de la coronación canónica de la patrona, privilegio concedido por su antigüedad, milagros y devoción popular. La joya original la portará durante todo el Novenario.

El primer turno llevó a la patrona hasta aproximadamente La Trocha. A partir de ahí, los demás turnos (2, 3, y 4) la cargaron sucesivamente hasta llegar a Las Tres Cruces, donde ya es el pueblo, sobre todo las mujeres, quienes portaron la talla. En el Amparo, la cofradía titular de esa ermita, presidida por Agustín Margallo, promovió de nuevo un homenaje: un breve pregón y una ofrenda floral en la persona de Fidel Valle Rico, árbitro de fútbol, padre de árbitro, barbero, cacereño de pro.

Los hermanos detuvieron luego la talla mirando al hospital para pedir por los enfermos y a Concejo llegaron en torno a las 19.30, momento en que el pueblo adoró en masa a la Virgen, mientras la alcaldesa Elena Nevado, que de nuevo lució mantilla en tonos crudos y traje de dos piezas, entregó el bastón de mando a la patrona que desde ayer y durante el Novenario ostenta el título de alcaldesa honoraria de la ciudad. Este año, el bastón lo colocó en las andas Antonio Bazo Machacón, que además se estrenó como subjefe del turno 2, conocido como el de la calderilla o de los bajitos.

A la procesión acudieron los representantes de la Unión de Cofradías Penitenciales y de las de Gloria, los miembros de la Cofradía de la Soledad de Badajoz y de las Reales Asociaciones de Caballeros y Damas de Guadalupe y de las hermandades de la Victoria de Trujillo, San Jorge de Cáceres y de la de Argeme de Coria. Tras la banda municipal y de la diputación, la réplica del pendón de San Jorge, símbolo de la reconquista de Cáceres por las tropas de Alfonso IX de León.

A continuación, le seguían los miembros de la corporación municipal y más de 60 niños, algunos de ellos con chubasquero, acompañan a la Virgen, que igual que el resto de los hermanos vistieron con túnica azul cielo, capelina, guantes y cinturón blancos, y zapato negro. Desfilaron los niños guiadores de El Redoble, los miembros del cabildo, mandos militares, el Cuerpo Nacional de Policía y de policía local, mujeres con mantilla y trajes regionales, y el obispo, Francisco Cerro, con traje coral morado y solideo violeta.

CALEROS La patrona enfiló ya hacia Caleros, hermana de honor de la cofradía, donde se vivió uno de los momentos más emocionantes de la procesión. A su entrada en la calle, decorada con arcos de flores y palmeras, los hermanos bailaron a la Virgen al ritmo del Redoble. La talla lucía impresionante sobre unas andas decoradas por la camarera de ornato Pilar Campos y el resto de sus colaboradoras, que repartieron con esmero claveles, rosas y gladiolos en las seis ánforas de plata de las andas.

Siguió la Virgen hasta la ermita del Vaquero, donde el coro Alborada del padre Gianni le cantó Virgen Morenita. En Santiago recibió la patrona el homenaje de los Scouts Sant Yago y de las cofradías del Nazareno y de la Sagrada Cena. El grupo Sabor Mangurrino le dedicó sus plegarias y en las Cuatro Esquinas la tuna le hizo un sentido homenaje al cumplirse los 25 años que llevan los tunos cantándole a la Virgen. Acudieron las tunas de Magisterio, Derecho, Politécnica, Veterinaria y la Cuarentuna.

De ahí llegó la Virgen a la plaza Mayor, donde como es tradición la cargó a hombros la corporación municipal. Además, coincidiendo con el 30 aniversario de la fundación de la Banda de Cornetas y Tambores del Humilladero, esta cofradía le dedicó tres marchas. Tras las palabras del obispo y la alcaldesa, la patrona enfiló hacia Santa María. El Novenario ya ha comenzado y este año tendrá como predicador al padre Antonio Sanfélix Forner, que ayer también participó en la procesión.

20 abr 2016

La ciudad recibe hoy a la patrona, que desafiará a la amenaza de lluvia

La Virgen de la Montaña estará arropada durante su bajada por la tuna, la banda del Humilladero y el Coro Rociero.

La amenaza de lluvia marcará la bajada de la Virgen de la Montaña a la ciudad. Según la Agencia Estatal de Meteorología, la previsión de precipitaciones para hoy es del cien por cien hasta las seis de la tarde. A partir de esa hora, se reduce al 65 por ciento.

La patrona partirá a las cinco y media de su Santuario. Minutos antes, en función de la evolución de las nubes, la cofradía decidirá si la imagen saldrá cubierta o no por una nueva estructura de plástico, en forma de iglú, diseñada para protegerla del agua. El invento lleva la firma Joaquín Álvarez, miembro de la junta directiva.

Integrantes de la cofradía probaron ayer por la tarde la estructura sobre el paso de la Virgen. Si finalmente se apuesta por colocarla, permanecerá sobre las andas durante todo el recorrido de bajada. La otra alternativa que se maneja es recurrir al plástico tradicional, que permite su montaje y desmontaje en el momento, en función de si llueve o no en cada tramo del recorrido.

Mientras tanto, la ciudad se prepara para brindar el recibimiento a la patrona, que permanecerá en la Concatedral de Santa María hasta el próximo 1 de mayo. Una año más, Fuente Concejo será el escenario elegido para dar la bienvenida a la Virgen de la Montaña. Se espera que la llegada a este punto sea a las 19.30 horas. Hasta aquí se trasladarán las autoridades civiles y religiosas.

La alcaldesa, Elena Nevado, entregará el bastón de mando a la imagen, que se convierte hasta su regreso al Santuario en alcaldesa simbólica de todos los cacereños. En esta ocasión, el encargado de encaramarse en las andas de la patrona para colocarle el bastón será Antonio Bazo, hermano de carga activo de la cofradía. «Para mí supone todo un honor como cacereño y como cofrade. Es todo un privilegio», admite Bazo. El presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, asistirá a la bajada.

A las cinco y cuarto de la tarde, 15 minutos antes de la salida de la procesión, la cofradía impondrá las medallas a los nuevos integrantes del grupo de hermanos de carga activos. Este año serán seis. Los hermanos activos o titulares son los encargados del llevar a la Virgen durante la procesión. Son 120 y se dividen en cuatro turnos. Esta vez el turno responsable de sacar la imagen del Santuario y de entrar con ella en la Concatedral es el número uno, dirigido por Santos Benítez.

Durante su descenso a la ciudad, la Virgen estará arropada por diferentes colectivos. La tuna universitaria no faltará a su cita en la Plaza del Duque. Este año la serenata, prevista para las 20.30 horas, será especial. Se cumplen 25 años desde que los tunos cantan a la patrona en las Cuatro Esquinas y, por eso, se ha invitado a antiguos componentes de este colectivo a sumarse al acto.

La llegada de la Virgen a la Plaza será entre las 21.30 y las 22.00 horas. Aquí, de forma excepcional, la banda de cornetas y tambores de la Cofradía del Humilladero dedicará tres marchas de paso lento a la patrona con motivo del 30 aniversario de esta agrupación musical. Una vez que la alcaldesa y el obispo, Francisco Cerro, den la bienvenida oficial con sus discursos, la patrona se dirigirá a la Concatedral, donde se recogerá. Por segundo año consecutivo, el Coro Rociero cantará a la Virgen en la Plaza de Santa María acompañado de la Banda Municipal.

La patrona lucirá el manto número 49, de tisú de plata y bordado con oro fino. Fue un obsequio de la ciudad con motivo de las bodas de plata de la coronación de la imagen, en 1949. El paso estará decorado con gladiolos blancos y claveles rosas.

19 abr 2016

LA FIESTA DE LOS PATRONOS / COMIENZA EL NOVENARIO La tuna y la banda del Humilladero rinden este año su especial homenaje a la patrona de Cáceres

Cáceres ya está casi a punto para recibir a Nuestra Señora la Santísima Virgen de la Montaña, patrona de la ciudad, con motivo de la celebración de un novenario que este año será más que especial porque la cosa va de aniversarios. La cofradía trabaja incansablemente para que mañana miércoles, a las 17.30 horas, todo esté listo para la salida del santuario de la imagen y su llegada a Fuente Concejo, prevista a las 19.30.

La procesión tendrá esta vez dos paradas muy especiales. La primera será en las Cuatro Esquinas, donde es habitual que la tuna le cante Cacereña salerosa ; en esta ocasión también lo hará, pero con un repertorio muy especial al cumplirse 25 años desde que la tuna dedicara por vez primera sus personales plegarias a la talla.

La segunda parada será en la plaza. Allí, la banda de cornetas y tambores de la Cofradía del Humilladero le dedicará tres marchas al cumplirse el treinta aniversario de su fundación. La banda interpreterá la primera composición en el momento en que la corporación municipal deja de cargar a la Virgen, y las otras dos cuando la patrona enfila por la parte antigua hacia Santa María.

Pero el trabajo de la cofradía comenzará a primera hora de la tarde con los preparativos de la procesión. La Virgen de la Montaña, una talla de estilo sevillano realizada en madera de nogal policromada por artista desconocido entre los años 1620 y 1626 y a la que los cacereños rinden culto desde el siglo XVI, bajó por vez primera a la capital el 3 de mayo de 1641 ante las peticiones del vecindario en un año de grandes sequías. Mañana lo hará portando, como es tradicional, la corona de diario, ya que las de las campanitas está pendiente aún de una restauración. La de diario es una corona llena de majestuosidad, circular de plata dorada, elaborada con las joyas que sobraron de la comunmente denominada 'Corona buena', fabricada en 1924 por el prestigioso joyero madrileño Félix Granda, de cruces de rubíes, oro, brillantes, zafiros y esmeraldas, cuajada de diamantes por la que se pagaron 150.000 pesetas.

EL MANTO Igualmente, vestirá el manto que le regaló la ciudad para las bodas de plata de la coronación canónica en 1949, una prenda magnífica de estilo renacimiento, hecha de tisú de plata fina con oro fino de alto relieve.

Como marca la tradición, antes de la procesión los cofrades y miembros de la junta de gobierno de la Real Cofradía comerán en el restaurante del santuario los huevos fritos con patatas y chorizo. Poco después, en torno a las cinco de la tarde, el hermano mayor organizará los turnos de carga con el reparto de planillos. El total de hermanos aspirantes son este año 80, a nueve de ellos se les impondrá la medalla de aspirantes a hermanos de carga activos. Luego, en presencia del capellán de la cofradía, Florentino Muñoz, se rezará la Salve.

Junto al templete quedarán entonces dispuestos los 4 turnos de 30 hermanos que conforman los 120 que cargan a la Virgen. En esta ocasión, del santuario la sacará el primer turno. La patrona saldrá sobre sus andas de plata adquiridas en los años 60 en un taller sevillano. La procesión de bajada iniciará su camino encabezada por el estandarte de la cofradía, de raso, con un medallón de plata en el centro que reproduce en oro la imagen de la Virgen. Más de 60 niños acompañarán a la Virgen, que igual que el resto de los hermanos visten con túnica azul cielo, capelina, guantes y cinturón blancos, y zapato negro. También desfilan los niños guiadores de El Redoble.

El segundo turno llevará a la patrona hasta la Trocha. A partir de ahí los demás turnos la cargarán sucesivamente hasta llegar a las Tres Cruces, donde es el pueblo, sobre todo las mujeres, quienes portarán la talla. Ya en el Amparo, la cofradía titular de esa ermita le rendirá un homenaje y unos pasos más abajo los hermanos detendrán la talla mirando al hospital para pedir por los enfermos.

La procesión, a la que acudirán la alcaldesa y el presidente de la Junta, Fernández Vara, vivirá sus momentos culminantes a su llegada a Fuente Concejo y su entrada en la calle Caleros (es hermana de honor y hoy los vecinos ya la engalanan). Finalmente, antes de entrar en Santa María la banda municipal y el Coro Rociero le cantarán Triana de Esperanza .