2 mar 2012

LA BAJADA DE LA VIRGEN, DE INTERÉS TURÍSTICO

Cáceres quiere aprovechar el tirón de la patrona. La bajada de la Virgen de la Montaña desde el Santuario hasta la ciudad, uno de los acontecimientos del año en la capital cacereña, debe servir también como gancho para atraer visitantes. Así lo entiende el Gobierno de Elena Nevado, que ha informado esta mañana en el transcurso de la Comisión de Cultura, Festejos y Turismo de su propuesta para que la bajada sea declarada por la Junta de Extremadura fiesta de interés turístico regional. Por el momento se trata de una posibilidad que debe concretarse mediante la puesta en marcha del correspondiente expediente. Izquierda Unida, cuyo portavoz en la comisión es su concejal Manuel Cruz, ha lamentado que el Consistorio pretenda potenciar su imagen turística mediante una celebración eminentemente religiosa. La versión del Gobierno es otra: el interés de la bajada de la Virgen supera el ámbito puramente religioso y alcanza una dimensión social. "En lo esencial todos estamos de acuerdo. Por eso se va a plantear ante la Junta de Extremadura el correspondiente trámite. La bajada es un acto religioso, pero no solo. También tiene connotaciones culturales, sociales y hasta comerciales", resalta el titular de Cultura, Jesús Bravo. En la comisión se ha votado, además, la solicitud de declaración como bien de interés cultural (BIC) del barrio judío. Los representantes de los tres grupos políticos con presencia en la Corporación municipal han expresado su apoyo y la moción ha salido adelante por unanimidad. Ahora el expediente se iniciará ante la Consejería de Educación y Cultura. El Consistorio recuerda que en la zona se encuentran calles como San Antón, Rincón de la Monja, Adarve del Cristo, comienzo de la calle de Pereros, cuesta del marqués o Callejón del Moral, "rincones principales entre los que destaca la ermita de San Antonio, en la que se instaló la antigua Sinagoga". El Ayuntamiento, asimismo, ha decidido retirarse de la Red de Cooperación de Ciudades en la Ruta Vía de la Plata, por considerar que no se están cumpliendo los objetivos de promoción de la ciudad y por el alto coste que representa, unos 12.000 euros anuales. El PSOE se ha abstenido, mientras que PP e IU han votado a favor.